Lo cierto es, que la frase inspección/comprobación de Hacienda nos da escalofríos a todos, pero llevando una contabilidad al día y la documentación bien organizada, no debe suponer mayor problema. Normalmente y en primer lugar, la administración tributaria realiza una verificación de datos, y de tal forma solicitan documentación para ver si concuerda con lo que has presentado; En el supuesto caso de que no les “cuadre” es cuando ya comienza la inspección/comprobación. Veamos en qué casos pueden saltar las alarmas.

Deducción de gastos erróneos

Es la infracción más frecuente, en ocasiones puede ser intencionada aunque en otras es por puro desconocimiento, ya que existen muchas partidas que generan dudas sobre su afectación a la actividad y con ello su deducibilidad.

Los gastos más frecuentes que cualquier autónomo puede considerar como deducibles son: los de su propia vivienda (para aquellos que realizan la actividad desde su domicilio habitual), el teléfono, las dietas, el vehículo e incluso los gastos de vestuario. Estos gastos deben ser estudiados antes de incorporarlos y siempre han de estar correctamente justificados.

Pedir la devolución del IVA

Solicitar la devolución del IVA negativo del modelo 303, es causa de inspección/comprobación y más si la cuantía es sustanciosa. Obviamente solo quieren contrastar que realmente deben devolverte el dinero y que todo es correcto.

Descuadre en los modelos trimestrales y anuales

Es fundamental que todos los modelos trimestrales cuadren con su correspondiente modelo anual. En caso contrario, tenemos la notificación de Hacienda prácticamente asegurada para aclarar las diferencias. Cabe recordar que los modelos anuales no suponen pago alguno, son sólo informativos de la evolución de tu negocio a lo largo del año, pero otra de las funciones es detectar anomalías.

Gastos elevados en relación con los ingresos durante varios períodos

Si tienes pérdidas durante mucho tiempo o bien, tu facturación es anormal, ya que no proporciona sustento, Hacienda querrá que justifiques por qué mantienes tu negocio abierto, ya que puede sospechar que no estés declarando todos tus ingresos.

Solicitud de subvenciones

También es otro motivo para que te vigilen, ya que deben verificar que estés declarando correctamente las subvenciones que vas a obtener y si efectivamente debes obtenerlas.

Aun así, si parecen pocos los motivos, se realizan visitas aleatorias, sin necesidad de que con la realización de tu actividad salte ninguna alarma. Según datos de la Agencia Tributaria, ocho de cada diez técnicos, centran sus trabajos en autónomos y pymes.

Cómo prevenirlas y/o superarlas

Lo primero y más importante es llevar una contabilidad limpia y transparente,  al día y ordenada. Hay que conservar la documentación durante al menos cinco años, ya que es el período que te pueden revisar tranquilamente. En caso de que finalmente tengas una inspección/comprobación, una actitud colaborativa es muy positiva, así que lo mejor que puedes hacer es recopilar toda la documentación solicitada de forma ordenada y aportarla dentro de los plazos impuestos o encargar a un despacho especializado, que se encargue de todas estas tareas.